El pasado día 21 de Enero presentó su tesis doctoral, dirigida por el profesor Kako Castro Muñiz, Juan Marcos Adrio Fondevila, obteniendo una calificación de sobresaliente. El tribunal estaba compuesto por el Dr. José Ramón Alcalá Mellado, como presidente, la Dra. María José Martínez de Pisón como vocal y la Dra. Lola Dopico Aneiros como secretaria. La tesis titulada: «De la imagen al papel. La gestión de color en el proceso artístico del S.XXI», centra la investigación en la gestión de color en el proceso de impresión artístico de la imagen numérica, e intenta responder las siguientes cuestiones ¿Cuál era y cuál es el recorrido de la imagen a color al papel? ¿Cómo emplear la gestión de color para conseguir los resultados deseados a la hora de pasar la imagen numérica a papel?, ¿Qué puede aportar a nuestro trabajo artístico?, ¿Qué uso se hace de ella?, ¿Qué problemas y qué soluciones encontramos en el proceso? “Ansel Adams hizo una comparación clásica entre el negativo-partitura y la copia-ejecución, y sólo en su ejecución la música existe”
Si se pueden definir tres posturas del artista ante la creación de una imagen, una primera postura se centra en la toma, dejando como único acto de creación por parte del autor la captura de la imagen. La segunda postura consideraría el acto de creación por parte del autor las acciones de la toma y edición (selección) de las imágenes, dejando el copiado en manos de los técnicos de laboratorio. En una tercera postura, el autor se involucra desde la previsualización de la imagen hasta su forma final. Es consciente de su intención de crear una imagen-objeto en papel o en cualquier medio o soporte elegido, una proyección, etc, y sus decisiones en todas las fases del proceso son tomadas conforme a ello. En la época de la imagen foto-química era habitual que el artista adoptase la primera o segunda postura debido a las necesidades que requería realizar correctamente el copiado o impresión a color de la imagen. Con la llegada de la imagen numérica esto se ha visto reducido, lo que ha posibilitado la implicación de los artistas en la tercera postura mencionada. Esto amplía la tarea creadora con el nuevo medio tecnológico, donde ocupa un lugar destacado el uso de la gestión de color.
Edmond Couchot explica que la imagen numérica “es la traducción visual de una matriz de números que simula lo real -el objeto-, de la que puede restituir casi una infinidad de puntos de vista. Es una imagen-matriz capaz de crear ella misma -porque es íntimamente solidaria de los circuitos de la computadora y del programa que la genera- una multiplicidad de otras imágenes” . François Soulages afirma que el análisis necesario para comprender la fotografía debe ser materialista cuando se refiere al proceso de copiado del negativo a papel. Lo que caracteriza, según Soulages, la primera etapa del proceso fotográfico que denomina la obtención generalizada del negativo es la irreversibilidad de los procesos acometidos. Es decir, el acto de fotografiar es irrepetible, ya se ha realizado de un modo y no se puede volver atrás en el tiempo. Lo podemos repetir, pero siempre será una variante del anterior (aunque sea mínima) y nunca igual. Y la misma irreversibilidad sucede con las etapas del revelado del negativo foto-químico. Pero, debido a que partimos de la captura numérica, la etapa del revelado del negativo ha pasado de ser un proceso químico a ser un proceso de cálculo matemático, y como tal, ha perdido su irreversibilidad para convertirse en inacabable. La segunda etapa que Soulages denomina la obtención restringida de la foto, se caracteriza por su trabajo inacabable, ya que podemos realizar variaciones infinitas dentro del copiado de un negativo para obtener numerosas copias de este y ninguna será igual a otra. Es un trabajo que puede ser retomado en cualquier momento y que se puede abordar de manera diferente. En consecuencia, según François Soulages lo fotográfico (entendido como lo específico de la fotografía) puede interpretarse como la articulación de lo irreversible y lo inacabable. Esta tesis se centra en ésta segunda etapa del trabajo inacabable fotográfico, para intentar aclarar, dentro de lo posible, los pasos a dar en el camino hacia la impresión de una imagen fotográfica a color partiendo de una imagen-matriz-numérica.
El primer capítulo de la misma, aborda la evolución de la reproducción del color, centrándose en la imagen fotográfica como impulsora y aglutinadora de los cambios que se han producido en la tecnología con respecto a los procesos de reproducción del color a lo largo de los años. Constatando que muchos procesos foto-numéricos actuales se basan en anteriores procesos foto-químicos; y haciendo también, una introducción a la evolución de los procesos de impresión de la imagen numérica a color y sus interacciones con el arte.
El segundo capítulo se centra en las características del color y su gestión en la imagen numérica. Analizando conceptos básicos de la gestión de color, explicando sus fases, elementos esenciales y cómo realizarla. Comparando también la calidad de gamut de color logrado por distintos sistemas de impresión de la imagen a color como el Offset, el foto-químico y el sistema de impresión foto-numérico mediante inyección de tinta. Por último, se analiza la mejora lograda mediante los sistemas de inyección de tinta con tintas basadas en pigmentos en cuestión de gamut y durabilidad de las impresiones a color, así como la conveniencia de utilizar el espacio de trabajo Adobe RGB o ProPhoto en el revelado Raw dependiendo del dispositivo de captura utilizado.
Comparativa en 2D y 3D del gamut del espacio de color Adobe RGB (línea y rejilla multicolor), el gamut de la tecnología Digital C-print del papel Fuji Cristal Archive en la máquina Durst Lambda (línea y rejilla amarilla) y de la tecnología de inyección de tinta con tintas basadas en pigmentos del papel Hahnemühle Photo Rag Baryta en la máquina Epson Stylus Pro 4900.
La comparativa en 2D y 3D del gamut del espacio de color de trabajo Adobe RGB (línea y rejilla multicolor) y el gamut de la cámara Nikon D700 (línea y rejilla roja) plantea la conveniencia de emplear un espacio de color de trabajo más amplio con este dispositivo. El tercer capítulo de la tesis se dedica, por una parte, a investigar los sistemas de impresión más empleados y la aplicación práctica de la gestión de color en el proceso artístico analizando la obra de 115 autores presentes en cuatro libros de fotografía contemporánea publicados entre el año 2000 y el 2005. Se constata un problema de falta de terminología apropiada y de consenso de uso de la misma para describir procesos y técnicas de impresión a color, además, se puede ver claramente la tendencia de los autores a adoptar los nuevos procesos de impresión mediante inyección de tinta a partir del 2005.
Por otra parte, en este capítulo, se recoge el análisis de los datos de las entrevistas realizadas a los laboratorios de impresión artística en España que poseen el Certificado Digigraphie o el Certificado de estudio Hahnemühle y que dedican la mayor parte de su trabajo a la impresión de trabajos artísticos. De esta manera se extrae información sobre los errores más comunes a los que se enfrentan a la hora de imprimir, el uso de la terminología para describirlo y otras cuestiones relativas a la gestión de color aplicada al trabajo artístico.
En el cuarto apartado se presentan las conclusiones. En éstas se profundiza en los problemas de terminología y se presenta una propuesta para describir la impresión artística con precisión. Seguidamente, se establece una relación entre la gestión de color en los procesos foto-químicos y en los procesos foto-numéricos, analizando similitudes y diferencias, para, finalmente, constatar las posibilidades de la gestión de color en la realización de proyectos con la imagen foto-numérica. A modo de anexo se incluye la experiencia de la gestión de color aplicada al trabajo artístico, analizando las aportaciones de ésta en los dos últimos trabajos expositivos de Juan Adrio, titulados Tempo Gris realizado en el año 2013 y expuesto en el Pazo de Cultura de Pontevedra y Visibilidade Mínima, realizado en 2014 y expuesto en la Fundación Laxeiro de Vigo.